La forma en que salimos con personas, conocemos personas nuevas e interactuamos socialmente cambia constantemente, y se nos olvida que tenemos que ajustarnos a los cambios de nuestro entorno. Pero eso no significa que tengamos que cambiar lo que buscamos. El tipo de relación que buscamos es nuestra decisión, siempre y cuando las personas involucradas actúen con sinceridad, la relación ya sea monógama, poliamorosa o de cualquier índole funcionará.
Tenemos la posibilidad de usar nuestro teléfono inteligente e interactuar con miles de personas en cuestión de minutos, y ese quizá sea el problema, estamos mal acostumbrados a tener mucho de donde elegir.
Nos hemos acostumbrado a tomar las citas como idas al supermercado, si la persona no cumple con nuestros requisitos lo sacamos del carrito de mercado. Tenemos una visión irrealista de la persona que queremos en nuestra vida y cuando alguien no se acerca a ese prototipo lo dejamos a un lado y seguimos buscando.
Tener una lista de requisitos tan alta y exagerada hace que las personas nunca alcancen lograrlos y por ende la persona disminuya sus opciones de conocer personas nuevas. No hay nada de malo en tener cualidades y valores que esperamos encontrar en alguien, pero crear un hombre perfecto en nuestra mente y compararlo con cada persona que conocemos crea un estándar irreal y asusta a las personas que quizá están interesadas en nosotros.
Dejemos de repetir frases como: «es que no hay con quien tener una relación». Tengamos fe, porque en la vida real existen miles de hombres buenos que están deseando encontrar una relación, es cuestión de darnos una oportunidad.
Usemos las redes sociales de forma más concreta, si están buscando sexo sin compromiso, díganlo para que la gente sepa qué esperar. Lo mismo si están buscando algo más serio, la persona que tenga algo similar en mente les dará corazón. Pero el Príncipe Azul se asustará si busca algo serio y recibe respuestas monosílabas y preguntas sobre el rol.
Decidí tomar un descanso de salir de hombres, me encontré repitiendo las mismas conversaciones en Grindr y luego sintiéndome decepcionado por las mismas razones, dejar de usar aplicaciones de citas me permitieron analizar lo que quiero y enfocarme en descubrir lo que necesito en mi vida.
Todos estamos buscando nuestro final feliz, pero ese final feliz es diferente para cada uno de nosotros, ya que viene en distintas formas y tamaños.
Si no está seguro lo que quiere, salga al mundo y descúbralo. No se acomoden a las expectativas de otra persona por no estar solos, no dejen que otros les digan cómo amar y amarse.