En la conversación sobre diversidad y género, cada vez emergen términos que nos ayudan a comprender mejor las experiencias de las personas trans. Uno de ellos es cispassing, un concepto que aborda cómo las personas trans pueden ser percibidas socialmente como cisgénero. Este fenómeno está cargado de implicancias personales, sociales y políticas que vale la pena explorar.
¿Qué es el cispassing?
El término cispassing hace referencia a la capacidad de una persona trans de ser vista y tratada por los demás como si fuera cisgénero, es decir, como alguien cuya identidad de género coincide con el sexo asignado al nacer. Por ejemplo, una mujer trans que es percibida como una mujer cisgénero estaría experimentando cispassing. Este concepto, aunque parece simple, lleva consigo una compleja carga emocional y social.
Ventajas y desafíos del cispassing
Lograr cispassing puede otorgar a las personas trans ciertos beneficios en una sociedad que privilegia lo normativo. Entre ellos se encuentra la posibilidad de evitar discriminación, acoso o violencia, debido a que quienes las rodean no perciben que son trans. Sin embargo, esto no significa que sea un objetivo que todas las personas trans deseen alcanzar o puedan lograr.
Por otro lado, el cispassing también puede generar desafíos. Para algunas personas trans, la presión social por “encajar” en un estándar cisgénero puede ser agotadora y llevar a cuestionamientos internos sobre la autenticidad de su identidad. Además, las personas que no logran cispassing enfrentan una doble marginación, ya que son más visibles y, por ende, más vulnerables a la discriminación.
El problema de la idealización del cispassing
En algunas comunidades, el cispassing es visto como un ideal al que las personas trans deberían aspirar. Esta percepción puede ser problemática, ya que refuerza los estándares cisnormativos y deja de lado la diversidad de experiencias dentro de la comunidad trans. Cada persona trans tiene su propio camino y no debería sentir presión de adaptarse a expectativas externas.
¿Cómo podemos apoyar mejor a las personas trans?
Es fundamental recordar que la identidad y validez de una persona trans no depende de su capacidad para pasar como cisgénero. La verdadera aceptación radica en respetar las identidades trans en todas sus expresiones. Como sociedad, podemos contribuir educándonos, evitando juicios basados en la apariencia y luchando contra las estructuras que perpetúan la discriminación.
En definitiva, el concepto de cispassing nos invita a reflexionar sobre cómo entendemos y tratamos a las personas trans. Más allá de cómo se perciban o sean percibidas, su identidad merece respeto, dignidad y derechos plenos.