El fallo emitido el lunes por el Tribunal Supremo de Barbados, en el Caribe, es un momento crucial para activistas y organizaciones sociales de la isla que llevan años luchando para eliminar esas leyes, incluyendo una que estipulaba cadena perpetua para hombres que hayan tenido relaciones homosexuales.
Si bien las leyes raras veces eran aplicadas, daban a entender que las personas LGBTQ eran criminales y ciudadanos de segunda clase, señaló Braun.
“La eliminación de estas leyes revierte eso y de un día para el otro le dice a la sociedad entera que esto es un contacto consensual y que lo que la gente desea hacer en sus relaciones privadas no es asunto de las leyes”, añadió Braun en entrevista telefónica.
Varios grupos cristianos en el Caribe se oponían a la anulación de dichas leyes, y contaban con el apoyo de algunos políticos que invocaban a Dios en sus argumentos.
Braun dijo que ahora hay solo seis países en el continente con ese tipo de leyes, incluyendo Guyana, Granada, Dominica, San Vicente y las Granadinas y Jamaica, donde miembros de la comunidad LGBTQ han huido tras ataques violentos. Hay un caso pendiente en Santa Lucía. Recientemente, tribunales caribeños han declarado inconstitucionales ese tipo de leyes en Antigua & Barbuda y San Cristóbal y Nieves.