El sexo no es lo único que contribuye a tener una buena relación de pareja, hay muchas otras cosas que entran en juego y definitivamente no deberías quedarte con alguien tóxico solo porque el sexo es increíble, pero si es un factor importante que, de acuerdo con un estudio realizado por la psicóloga Anik Debrot, juega un papel muy importante en la relación de pareja.
Realizando una serie de investigaciones, el Debrot y su equipo fueron capaces de identificar la forma en que los besos, abrazos y el contacto físico entre las parejas contribuye de forma positiva a la satisfacción de la relación y el bienestar general de las personas involucradas (y no, tener sexo varias veces al día no te hace un pervertido).
Por un lado, los investigadores de la Universidad de Toronto y la Universidad de Friburgo en Suiza encontraron que el sexo y la felicidad pueden estar conectados, ellos descubrieron que las personas presentan un mayor grado de bienestar cuando tienen una vida sexual activa y satisfactoria (porque activa no siempre es buena). La investigación dice, vía Psychology Today, que “el tamaño de la diferencia en el bienestar de las personas que tienen relaciones sexuales una vez a la semana, en comparación con aquellas que tienen relaciones sexuales menos de una vez al mes, fue mayor que el tamaño de la diferencia en el bienestar para aquellos que ganan $25,000 dólares anuales en comparación con quienes ganan $75,000 dólares al año.” En pocas palabras, el sexo te hace más feliz que el dinero.
La psicóloga Susan Krauss Whitbourne Ph.D., explica que “Se podría argumentar que las personas que son más felices son más propensas a tener sexo más a menudo porque están en una buena relación y están satisfechas con ella. El buen sexo, entonces, simplemente seguiría la buena dinámica de relación. También es posible que las personas que son más positivas en general tengan más probabilidades de involucrarse en una relación cercana que, a su vez, beneficia su bienestar”.
El estudio se llevó a cabo con parejas heterosxuales y homosexuales y al fina los investigadores quedaron convencidos de que el impacto del sexo en la felicidad estaba conectado en parte por aumentos en el afecto vinculados a la actividad sexual previa. Es una especie de ciclo, el sexo hace que crezca el afecto entre las parejas, ese afecto hace que quieran tener más sexo, lo que los hace más felices, y contribuye a tener una relación sana y satisfactoria.
Los autores concluyeron que, “Por lo tanto, el sexo no solo parece beneficioso por sus efectos fisiológicos o hedónistas … sino porque promueve una conexión más fuerte y positiva con la pareja” (y hay un promedio de veces en las que deberías hacerlo). Poco a poco, el sexo ayuda a fortalecer los lazos entre la pareja, lo que significa va reforzando la satisfacción. “Cuando una persona obtiene beneficios emocionales del sexo, la satisfacción de la relación de su pareja también se promueve con el tiempo”, explican.
Por otro lado, explican que no tener sexo puede tener efectos negativos en la relación y crear una especie de separación en la pareja, aunque hay situaciones especiales, como cuando envejecen o acaba de tener hijos, en los que tener sexo con menos frecuencia no causa problemas, pero, para eso, necesitan tener esa conexión y satisfacción inicial que sólo podrían haber conseguido por medio del sexo.
Por otro lado, el sexo tiene muchos beneficios mentales (que definitivamente aporta a tu nivel de felicidad), como reducir el estrés y la ansiedad. Los estudios sugieren que la actividad sexual puede estar conectada con una mayor satisfacción con la salud mental, mayores niveles de confianza, intimidad y amor en las relaciones, mayor capacidad para percibir, identificar y expresar emociones, uso disminuido de su mecanismo de defensa psicológica inmadura, o los procesos mentales para reducir la angustia del conflicto emocional.
En pocas palabras, el sexo hace mucho más que solo lo físico, y, aunque no tienes que tener sexo todos los días, es indispensable para que tu relación funcione.