En pleno siglo XXI, el debate social sobre los estereotipos de género en los juguetes sigue abierto. Lo demuestra el caso de Fran, un niño de 8 años de Cheles, municipio español, perteneciente a la provincia de Badajoz, cuya hermana hizo viral en las redes sociales su historia de acoso escolar sufrida por sus dos aficiones: coser y jugar con las Barbies. Todo surgió gracias a un trabajo de clase, según cuenta su hermana, Araceli Sierra, que escribió sobre su hermano para contar una historia de acoso escolar.
“A mi me gusta jugar mucho con las muñecas”, explica Fran, “porque imagino que son personas de verdad, y yo como si las fuera controlando”. Para su hermana “no hay juguetes para niños o niñas sino que cada uno somos diferentes y elegimos lo que nos gusta”.
“No hay juguetes para niños o niñas sino que cada uno somos diferentes y elegimos lo que nos gusta”
Su madre, Tania, se pregunta “¿por qué todos los niños tienen que hacer lo mismo? No es necesario”, se contesta.