Heteronormativo. Una respuesta a esta palabra muy escuchada en estos días

La definición de «heteronormatividad» en el diccionario Merriam-Webster es ‘la actitud de que la heterosexualidad es la única expresión normal y natural de la sexualidad’.

El Oxford English Dictionary cita al teórico queer Michael Warner como la primera persona en introducir el término ‘heteronormatividad‘ en 1991 en su libro Fear of a Queer Planet. En el libro, Warner postula que los supuestos heteronormativos están profundamente arraigados en muchos conceptos sociológicos. A menudo sin el conocimiento de la mayoría de las personas. La heteronormatividad a menudo aparece junto al término cisnormatividad. Esta es la suposición de que ser cisgénero, cuando tu sexo asignado se alinea con tu identidad de género, es la norma.

La cisheteronormatividad es la creencia de que ser un hombre con género masculino asignado al nacer y solo sentirse atraído a las mujeres cisgénero y viceversa es el «lo normal».

La heteronormatividad como concepto ayuda a explicar el inmenso privilegio que disfrutan las personas cisgénero y heterosexuales. Por el contrario, ayuda a explicar los obstáculos que enfrentan las personas LGBTQ en su vida diaria.

Cuando asumimos que la heterosexualidad es la única expresión “normal y natural” de la sexualidad, asumimos que ser gay, lesbiana, bisexual o cualquier otra orientación sexual que no pueda clasificarse como heterosexual significa desviarse de la norma. Más aún, la cisheteronormatividad refuerza la noción de que solo hay dos sexos, masculino y femenino. Y que estos sexos tienen roles, funciones y propósitos predeterminados que deben seguirse.

Esto no solo ha llevado al estigma y la discriminación de las personas LGBTQ, sino también de las mujeres. También ejerce presión sobre los hombres para que encajen en un estándar estrecho y tóxico de lo que significa ser un hombre.

Como sociedad heteronormativa, emitimos un juicio moral sobre aquellos que no se ajustan a los estándares que impone la heteronormatividad. En última instancia, obligándonos a empujar a cualquiera que se desvíe de estos estándares hacia los márgenes de la sociedad. Y todo esto no es solo un concepto abstracto también. Hay suficiente evidencia para sugerir que la heteronormatividad arruina la vida de las personas. Despoja a las personas de oportunidades y crea una gran disparidad entre las personas cishetero y LGBTQ.

La heteronormatividad es como una fuerza invisible que influye con quién salimos, a quién encontramos atractivo, cómo expresamos nuestro género y qué esperan nuestros padres e instituciones de nosotros. Pero este problema generalizado ha demostrado ser dañino y limitante para todos, incluidos aquellos que se identifican como heterosexuales.

Al ser más conscientes de qué es la heteronormatividad y cómo se manifiesta en nuestras vidas, podemos trabajar juntos para desmantelar este sistema que no beneficia a nadie.